Este estanque se desecó en 1951 y se recuperó a principios del siglo xxi, cuando se convirtió en la laguna interior más grande de Cataluña (con 126 hectáreas). Está enclavada en medio del llano cerealista de Lleida, lo que nos permite observar especies de ambientes acuáticos y esteparios. Con el proyecto de recuperación se recrearon a lo largo del estanque islas con diferentes formas, pendientes, alturas y emplazamientos propicios para las aves y otras especies animales.